VERSIONES
2020 (Demo)
MUSICOS
Javier López Trezza: Voz
Paul Viparke: Saxofón
Norberto Vogel: Piano / Teclados
Sebastián Fernández: Guitarra
CANCIONES
01. Vencejos
02. Mi crisantemo rojo
03. Singing bird
04. No importa
FICHA TECNICA
Grabado, mezclado y masterizado por Norberto Vogel en estudios Miller, en septiembre de 2020.
Dani Covelo: Diseño gráfico.
Patricia Wojtiuk: Artista plástica (Portada).
Micaela Chiozza: Fotos.
Todas las canciones del disco fueron escritas por Javier López Trezza y compuestas en colaboración con los músicos Norberto Vogel, Paul Viparke, Fabián E. Galdámez y Sebastián Fernández. Las canciones Vencejos y No importa son inéditas. Mi crisantemo rojo y Singing bird ya habían sido grabadas en el año 2012 en el demo Flores del corazón. Versiones fue completamente grabado, mezclado y masterizado en los estudios Miller, de Norberto Vogel.
"Para Javier López Trezza, el cantar, el escribir, el hacer, es un acto de esperanza sobre el vivir, no sobre la vida. Y esta vida tiene sus Versiones, de ahí el título del disco, para mí. Las versiones como alternativas, como interpretaciones, y la suya está basada en la música, en la poesía y en el tono en que desarrolla todo lo que vive, es eso lo que leo en sus letras, es su manera de evitar el mundo, este mundo que a veces es triste, violento y horrible."
MIRTHA BERMEGUI
(Directora de arte publicitario)
Emulando al vencejo
sobrevuelo la mar,
sé cómo hacerme invisible
y lo que debo olvidar.
La beso todos los días
cuando atardece la mar.
Se recuesta sobre la arena,
como la bajamar.
Ella es mi bajamar,
ella es mi bajamar,
mi bajamar,
mi bajamar.
Mi bajamar y yo
yo le robo besos,
le robo besos,
le robo besos.
La beso todos los días
cuando atardece la mar.
Se recuesta sobre la arena,
como la bajamar.
Ella es mi bajamar,
ella es mi bajamar,
mi bajamar,
mi bajamar.
Mi bajamar y yo
yo le robo besos,
le robo besos,
muchos, muchos besos.
«Ya le pedimos al espejo que no nos abandone».
Sé de su noche larga
y sus "Alfonsinas",
después abrazo la mar,
después abrazo la mar,
yo sé que abrazo la mar.
Un día le di las flores del corazón,
un día le di las flores, mi corazón,
flores del corazón,
flores del corazón.
Dicen que de la noche se sabe poco
y que ella sabe de mí
y debe ser así,
y debe ser así
porque de noche yo nunca me perdí.
Yo caminé con zancos
y les pedí a los santos
y les hablé a las piedras,
hablé con las piedras,
pero abracé el espejo y me convertí en canción
y me convertí en canción
y ahí estaba ella
y ahora somos canción.
Ella es mi vieja flor, la que calma mis penas;
ella es mi vieja flor, la que calma mis penas;
ella es mi vieja flor,
un crisantemo rojo,
mi crisantemo rojo.
Ella es mi eterna flor,
mi crisantemo rojo.
El hambre no es poesía.
Las flores,
las flores que cultiva,
un disco de Sumo,
la voz de Sam Chatmon.
La lluvia sobre la chapa
una eterna canción
del diamante
de Almendra.
Una ruta y un rancho
y un viejo poema,
y un viejo poema de Dylan Thomas.
El olor a sopa cuando hace frío
y su mano apretando mi mano.
Birds in the nest,
she and her singing bird.
Birds in the nest,
birds in the nest
and the singing bird.
Con dos tiros en la cabeza,
boca abajo y en el piso,
sangrando pólvora
la pude ver
y ella me vio también.
Se acercó,
me abrazó y me dijo
lo demás,
lo demás
no importa,
no importa,
no importa.
Con muchos años encima,
desbordado de canciones,
merodeando la vejez
entre miles de sueños,
algunos ya cumplidos,
la miro,
la abrazo y me digo
lo demás,
lo demás
no importa,
no importa,
no importa.